La obsesión consume sus corazones como un fuego incesante. En este torbellino, las reglas son difusas y el dolor se convierte en una arma. Cada encuentro es un peligro. El susurro de la lealtad llena el universo. Solo los audaces pueden navegar por este laberinto, donde el destino es siempre una incertidumbre. La Reina del Dragón Negro En